lunes, septiembre 27, 2010

Un wing derecho

No hay mejor defensa que un buen ataque, mi amigo, eso lo sabe cualquiera. ¡Por favor! Ahora se meten todos abajo. Están locos. tres pepas hice ese día. Y las otras tres se las serví al nueve, al morochón. Y no tenía bigotes. Lo que pasa es que algún mocoso se los pintó con birome para que se pareciera a Luque. Un gol, me acuerdo, un gol, la bola rebotó en el corner y se me vino. Ibamos perdiendo uno a cero, porque ¡ojo! habíamos arrancado perdiendo, y la hinchada bramaba. La puse debajo de la suela y casi la astillo. La empecé a pisar y me la traje despacito para el medio. El nueve se fue para la izquierda y el once también, para abrirme un poco. Yo la masé y un par de veces amagué el puntazo, pero el fullback me tapaba el tiro y no veía ángulo para el taponazo. Le cuento que yo no le hago asco a patear y cuando veo luz le sacudo. A mí no me vengan con boludeces....
(Memorias de un wing derecho - Roberto Fontanarrosa) Para Fernando, te metiste en un cuento del Negro, Fer...ja

lunes, julio 26, 2010

El ùltimo "centrojàs"

Peluffo saliendo lentamente de la cancha, las canilleras en la mano y el modesto estadio pendiente de su gesto final, casi una ceremonia, es el último eslabón de una larga cadena simbólica. Su sentido final escapaba al protagonista y a los ocasionales asistentes. No saben que el veterano 5 de Once Unidos -oscuro ejecutante de una partitura aprendida instintivamente, de oído- es en ese momento la modulación final de un gesto de cuya grandeza ha quedado solo la hueca forma. Peluffo es Obdulio Varela atravesando lentamente el Maracaná con la pelota bajo el brazo en la final del Mundial del 50; es Pipo Rossi levantando con un patadón tardío y quebrador al negrito Cejas, arreando a puteadas a la pendejada talentosa del Sudamericano de Lima. Peluffo es -finalmente- Rattín sentado y desafiante sobre la alfombra que conduce al podrido corazón del Imperio Británico. Porque el centrojás es -o fue, mejor- en nuestro fútbol, mucho más que un puesto o una camiseta: fue un tipo humano
(Para Marcelo Rodriguez - )

lunes, julio 19, 2010

Todo Llega

No es la idea ponerse melancólicos, pero tantos momentos cumbres hemos pasado, este grupo de amigos que pretendio algo parecido a un equipo, por motivos esquivos ya no refleja la misma contundencia. Se ha intentado reflejar los hechos, mezclarla con la poesía tan mundana y necesaria de nuestros ángeles inspiradores, para dar vida a un espacio pretencioso y divertido. Nada para reprocharse, mucho inflarse el pecho, eso si. Dejamos todo en la cancha, hasta donde se dijo basta, el futbol bien jugado se deja para los que saben, no?
El momento de legar este espacio va llegando, quizá alguno quiera tomar la posta, aunque los lectores son tan escasos como las virtudes de mis piernas con el balón...igualmente objetivo cumplido, uno expresa lo que siente, después de todo.
Lagrimón que se escapa, este corazón tan visceralmente expresivo, latente, sanguineo, falto de talento. Al menos cuento con Fontanarrosa, angel guardián.
Alguien nos seguirá leyendo?? que pretensión...
Va tocando a su fin sin estridencias ni seguidores.
Este dolor de ya no ser (Crónicas Panzas, Julio 2010)

lunes, junio 14, 2010

A Don Pancho y la Delfina

“Me gusta mi nombre porque a naide se le olvida”,
habrá pensado la coronela,
surcando a galope las cuchillas y los montes
a su lado aquel caudillo
un prócer de carne y hueso
soñó un país de panzas verdes
justo libre y soberano
que perdió como los grandes
derramando su rebelde sangre
entre los ceibos, talas y espinillos
a traición como mandan los impuros
y esa tierra generosa que
hoy llora su ausencia
evoca su destreza
mas se siente orgullosa
de las andanzas de aquel bellaco mozo
de corazón indómito, pasión , coraje
y amor como no hubo alguno
marcó a fuego a un pueblo ardoroso
al hijo pródigo que reclama su recuerdo inoxidable
época de mandingas y malones
experto jinete
fiel soldado de la santa Federación
amado por sus gauchos
nunca le faltó bravura
hasta en su final mostró los dientes
un drama a fuego que no se olvida
quiso salvar a su china y ansí
se hizo leyenda la historia
del Supremo Entrerriano
y bella, la Delfina
( A Don Pancho y la Delfina - coronela del ejército entre-riano) Panzas verdes -derechos reservados

miércoles, mayo 05, 2010

ENTRE RIOS

Es tan clara tu luz como una inocencia
toda temblorosa y azul.
Tu cielo está limpio de humo de chimeneas
curvado en una alta
paz de agua suspensa.
Y tus ciudades blancas, modestas, casi tímidas,
ríen su aseo rutilante entre las arboledas.
No hay en tu tierra gracias sorprendentes de lineas,
- apenas si una suave melodía de curvas-
pero tiene ella un
encanto de mujer, de sencilla, de agreste
belleza,
vestida de un silencio verde y feliz de campo,
toda húmeda de una alegría de arroyos,
con una cabellera densa de árboles libres.
(Poema Entre Ríos- de Juan L. Ortiz)